En diversos espacios académicos se hace referencia al tema de la sistematización; como un concepto relativo que muestra la falta de teoría y teorización como proceso en la disciplina de trabajo social; estudiantes, académicos e investigadores emplean frecuentemente el término sistematización como un concepto que justifica su falta de actitud para analizar, reflexionar y conceptualizar su experiencia y práctica profesional. Asimismo, se observa en los diversos espacios académicos (congresos, encuentros, seminarios, coloquios, reuniones y asambleas), el uso excesivo del concepto “sistematizar”; concepto que solamente se queda en el plano del discurso, para justificar la carencia teórica en la disciplina de trabajo social que fortalezca los procesos de intervención y que lleve a esta disciplina a un plano más científico, como ciencia social.
El proceso de abstracción en la construcción de un conocimiento científica resulta ser una tarea compleja para el sujeto, ya que este al apropiarse de objeto y recrearse en él en un proceso metodológico y regresar nuevamente en su calidad de sujeto pensante; vive y enfrenta un vaivén que transforman no solamente la realidad en la que está inmerso, sino también su propio ser, en calidad de ente pensante.
En esta tarea de subjetivación, de construcción de nuevas ideas, conceptos, teorías, leyes, modelos y paradigmas; el trabajador social, como sujeto pensante resuelve las dificultades que implican ir de lo concreto a lo abstracto, de lo objetivo a lo subjetivo; la sistematización adquiere una función fundamental en la construcción del conocimiento teórico a partir de práctica.
Martina no es la típica heroína, es una chica común y contradictoria como cualquiera de nosotros; apasionada del cuerpo humano excepto del suyo.
Tiene la agilidad de decirlo fácil, pero se vuelve complicado y se vive difícil. Una novela adictiva dónde la protagonista nos hace reír más de una vez con su cinismo adolescente y muy probablemente apenarnos de ello.
La administración de hospitales y salud pública es un área del conocimiento de la administración pública y tiene como finalidad el ejercicio adecuado de los recursos económicos y administrativos para la estructura, organización y operación hospitalaria que dé respuestas a las necesidades sociales en el ámbito de la salud.